La pesca es una de las
actividades que más convoca a visitantes y viajeros al Embalse Cruz del Eje.
Todos los cruzdelejeños los sabemos desde hace mas de cincuenta años y durante
todo ese tiempo contemplamos la presencia de pescadores en el murallón o en los
varios clubes de pesca que se ubican en las márgenes. En épocas determinadas
observamos la realización de eventos relacionados con este deporte; eventos de
muy buena organización, de gran trascendencia
y de importante convocatoria.
Contemplar y observar son dos actitudes de naturaleza
pasiva, y que poco aportan al desarrollo sostenido, sustentable, armónico y
competitivo que nuestra comunidad puede aprovechar de esta especialidad
recreativa y turística. En la actualidad sólo tenemos “pescadores que vienen a
pescar al Dique de Cruz del Eje”.
Lo anterior es lo que se denomina “Turismo Espontáneo”, o
sea, viajeros que se desplazan a un atractivo determinado por su propia
motivación únicamente y sin organización de servicios por parte de la comunidad
receptora. El Turismo Espontáneo no genera rentabilidad social ni ecológica ni
mucho menos económica, para una comunidad.
A la hora de evolucionar como destino turístico, la pesca
debe ser uno de los productos “vaca” (matriz BCG), es decir, aquel que “da”,
que genera continuamente esa rentabilidad social ecológica y económica. Para
ello, el paso primero y necesario es mudarnos las actividades pasivas de
contemplación y observación (y opinión en muchos casos); a las activas de
diagramación y organización. La herramienta clave es la planificación.
Un sistemático estudio de la pesca (especialidad motivante),
el pescador (viajero turista), el atractivo (el Dique) y la oferta de servicios
disponible en destino permiten elaborar un producto turístico estratégico para
lograr ese desarrollo sostenible, sustentable, armónico y competitivo antes
mencionado.
Así, nuestra vaga idea de “pescadores que vienen a pescar al
Dique Cruz del Eje”, tomará la forma de “Pesca en Cruz del Eje”, un producto
que se promociona en medios especializados, con una intensa oferta de
actividades y servicios, capaz de generar una demanda continua y constante, y
que posiciona al destino Cruz del Eje en el turismo interno.
Es un trabajo que lleva tiempo, recursos y esfuerzo. Manos a
la obra.
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